Es bastante alarmante ver a tu gato toser y surge la afirmación: Mi gato tose como si tuviera algo en la garganta. Muchos dueños de gatos no están familiarizados con la tos en felinos y pueden preocuparse de inmediato, ya que este tipo de comportamiento no es tan común en los gatos como lo es en los perros o en los humanos. Sin embargo, la tos en gatos puede tener múltiples causas, y en este artículo, como veterinario experto, te explicaremos las causas más frecuentes y qué hacer si tu gato presenta este síntoma.
Causas de la tos en gatos
Existen varias razones por las cuales un gato puede toser de esta manera. Algunas de las causas son relativamente benignas, mientras que otras requieren atención veterinaria urgente. A continuación, se describen algunas de las causas más comunes:
1. Bolas de pelo (tricobezoares)
Los gatos son animales que se acicalan constantemente, lo que los hace ingerir grandes cantidades de pelo. Este pelo se acumula en su sistema digestivo y, en algunos casos, forma bolas de pelo o tricobezoares. La tos es una de las maneras en que un gato intenta expulsar estos cúmulos de pelo, y puede sonar como si tuviera algo atorado en la garganta. Generalmente, después de toser, el gato vomitará la bola de pelo.
Síntomas adicionales:
- Tos seca o arcadas.
- Vómito ocasional (con o sin bolas de pelo).
Qué hacer: Puedes ayudar a reducir la formación de bolas de pelo cepillando a tu gato regularmente y proporcionándole alimentos o suplementos que ayuden en la digestión del pelo. Si la tos persiste y tu gato no puede expulsar la bola de pelo, es recomendable llevarlo al veterinario para una revisión.
2. Infecciones respiratorias
Las infecciones respiratorias, como la rinotraqueítis viral felina, también pueden causar tos en los gatos. Estas infecciones pueden ser de origen viral o bacteriano y suelen presentarse junto con otros síntomas, como estornudos, secreción nasal, fiebre y letargo.
Síntomas adicionales:
- Secreción ocular o nasal.
- Fiebre y decaimiento.
- Estornudos y, en algunos casos, dificultad para respirar.
Qué hacer: Es importante que un veterinario evalúe a tu gato si sospechas de una infección respiratoria, especialmente si es joven, anciano o tiene un sistema inmunológico comprometido. Las infecciones respiratorias pueden empeorar rápidamente y causar complicaciones. En muchos casos, el veterinario puede prescribir antibióticos u otros medicamentos para ayudar a tu gato a recuperarse.
3. Asma felina
El asma felina es una enfermedad respiratoria inflamatoria crónica que puede afectar a los gatos. Esta afección puede causar tos, jadeos y dificultad para respirar. La tos asmática puede sonar similar a la tos humana y, a menudo, se describe como una especie de arcada seca. El asma felina se desencadena por alérgenos presentes en el ambiente, como el polvo, el humo de cigarrillo o incluso algunos productos de limpieza.
Síntomas adicionales:
- Tos recurrente.
- Respiración rápida o superficial.
- Episodios de dificultad respiratoria (jadeos o resoplidos).
Qué hacer: Si sospechas que tu gato tiene asma, es crucial que lo lleves al veterinario para un diagnóstico. La asma felina puede requerir tratamiento a largo plazo con medicamentos, como broncodilatadores o corticosteroides, y ajustes en el ambiente para reducir los alérgenos. Además, evitar el humo de cigarrillo y utilizar productos de limpieza seguros para gatos reduce las crisis asmáticas.
4. Parásitos pulmonares
Los parásitos pulmonares, como los gusanos pulmonares, pueden infestar el sistema respiratorio de un gato y provocar síntomas como tos persistente, pérdida de peso y dificultades respiratorias. Aunque es más común en gatos que salen al exterior y cazan, también ocurre en gatos de interior si están expuestos a insectos o alimentos crudos.
Síntomas adicionales:
- Tos húmeda o persistente.
- Pérdida de peso y falta de apetito.
- Dificultad para respirar en casos graves.
Qué hacer: Si se sospecha de parásitos pulmonares, un veterinario realiza pruebas específicas, como análisis de sangre o radiografías. El tratamiento incluye medicamentos antiparasitarios específicos para eliminar los parásitos.
5. Cuerpos extraños en la garganta
Ocasionalmente, un gato puede inhalar o ingerir accidentalmente objetos pequeños, como fragmentos de juguetes o alimentos, que pueden quedar atrapados en su garganta. Esto puede provocar tos, arcadas y, en algunos casos, asfixia si el objeto obstruye la vía aérea.
Síntomas adicionales:
- Arcadas frecuentes o intento de tragar repetidamente.
- Dificultad para respirar o jadeo.
- Salivación excesiva.
Qué hacer: Si crees que tu gato tiene algo atorado en la garganta, es importante buscar ayuda veterinaria de inmediato. No intentes sacar el objeto por tu cuenta, ya que podrías causarle daño. Un veterinario puede realizar una evaluación y, si es necesario, una extracción segura del objeto.
Ahora sí, para resumir: ¿Qué hacer si mi gato tose como si tuviera algo en la garganta?
Si tu gato presenta un episodio aislado de tos, puede que no sea motivo de preocupación. Sin embargo, si la tos es persistente, recurrente o está acompañada de otros síntomas, es importante tomar medidas para identificar la causa subyacente. A continuación, algunos pasos que puedes seguir:
- Observa los síntomas adicionales: La presencia de otros síntomas puede ayudar a determinar la causa de la tos. Si tu gato presenta letargo, pérdida de apetito, secreciones o dificultad respiratoria, estos pueden ser indicios de una afección más grave.
- Evita exponer a tu gato a irritantes: Reduce o elimina alérgenos en el ambiente, como polvo, productos de limpieza fuertes o humo de cigarrillo. Estos pueden agravar problemas respiratorios, especialmente si tu gato tiene asma.
- Consulta a tu veterinario: Si la tos persiste o empeora, es fundamental que lleves a tu gato al veterinario. La tos puede ser un síntoma de diversas condiciones de salud, y el tratamiento adecuado dependerá del diagnóstico. Además, el veterinario realiza exámenes físicos y pruebas adicionales, como radiografías, para identificar la causa exacta.
La tos en gatos no debe tomarse a la ligera, especialmente si tu gato tose como si tuviera algo atrapado en la garganta. Aunque algunos episodios aislados pueden deberse a bolas de pelo, es importante estar alerta ante signos adicionales que puedan indicar una condición más grave, como infecciones respiratorias, asma o parásitos pulmonares. Ante cualquier duda o si los síntomas persisten, no dudes en consultar a tu veterinario. Recuerda que una intervención temprana puede hacer una gran diferencia en la salud y el bienestar de tu gato.
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