La fiebre en los perros puede ser una señal de alerta sobre infecciones o enfermedades subyacentes. Aunque la manera más precisa de medir la temperatura de un perro es usando un termómetro rectal, hay varias señales y comportamientos que pueden ayudarte a identificar si tu mascota tiene fiebre sin necesidad de un dispositivo. En este artículo, te responderemos a la pregunta cómo saber si un perro tiene fiebre sin termómetro.
¿Qué es la fiebre en perros?
La fiebre es una respuesta natural del cuerpo a infecciones, inflamaciones o enfermedades. La temperatura corporal normal de los perros varía entre 38°C y 39.2°C. Si la temperatura sube por encima de este rango, tu perro tiene fiebre.
Síntomas comunes de fiebre en perros
Aunque no tengas un termómetro a mano, hay varios signos que puedes observar para saber si tu perro tiene fiebre:
1. Nariz seca y caliente
Un mito común es que un perro con la nariz seca y caliente siempre tiene fiebre. Aunque no es una regla absoluta, cuando se combina con otros síntomas, podría ser una señal de fiebre. Si notas que la nariz de tu perro está seca por mucho tiempo y también tiene otros signos de malestar, es hora de estar atento.
2. Pérdida de apetito
Si tu perro está desinteresado en su comida, algo que normalmente le encanta, esto puede ser un indicativo de malestar. Los perros con fiebre suelen perder el apetito debido a la falta de energía o incomodidad que experimentan.
3. Letargo y apatía
Un perro febril puede mostrarse inusualmente perezoso. Si tu perro, que normalmente está activo y enérgico, pasa la mayor parte del día dormido o sin interés en sus actividades favoritas, podría estar enfermo.
4. Temblores y jadeo excesivo
Los temblores son una forma en la que el cuerpo de tu perro intenta regular su temperatura. Si observas que tiembla o jadea en situaciones donde normalmente estaría calmado, es importante estar atento a otros síntomas que puedan indicar fiebre.
5. Escalofríos y secreciones nasales
Los escalofríos pueden aparecer cuando un perro tiene fiebre alta. También pueden presentar secreciones nasales o oculares, que acompañan a las infecciones que pueden estar causando la fiebre.
Causas comunes de fiebre en perros
Identificar por qué tu perro podría tener fiebre es crucial para saber cómo actuar. Aquí algunas de las causas más comunes de fiebre en los perros:
1. Infecciones bacterianas o virales
Una de las causas más comunes de fiebre en perros son las infecciones. Estas pueden ser bacterianas, virales o fúngicas. Las infecciones del tracto respiratorio, las infecciones del oído, del tracto urinario o heridas infectadas son desencadenantes comunes de la fiebre.
2. Vacunas recientes
Al igual que en los humanos, los perros pueden desarrollar fiebre después de recibir ciertas vacunas. Esto es normal y generalmente desaparece en uno o dos días. Si sospechas que este es el caso, asegúrate de monitorear a tu perro, pero consulta a tu veterinario si la fiebre persiste.
3. Ingestión de sustancias tóxicas
Si tu perro ha comido algo tóxico, como alimentos o productos peligrosos para perros (plantas venenosas, pesticidas, etc.), podría desarrollar fiebre como respuesta del cuerpo al intentar eliminar las toxinas.
4. Enfermedades inflamatorias
Algunas enfermedades autoinmunes o inflamatorias, como la artritis, pueden provocar fiebre en perros. Si tu perro ha sido diagnosticado con alguna condición crónica, consulta a tu veterinario si notas que está desarrollando fiebre.
Qué hacer si sospechas que tu perro tiene fiebre
Si crees que tu perro tiene fiebre, es importante tomar medidas inmediatas para ayudar a tu mascota. Aquí te ofrecemos algunos pasos que puedes seguir:
1. Hidratación
Mantén a tu perro bien hidratado. Los perros con fiebre pierden más líquidos de lo normal, por lo que es esencial asegurarse de que siempre tenga acceso a agua fresca. Si no quiere beber agua, trata de ofrecerle un caldo sin sal para mantener su hidratación.
2. Compresas frías
Puedes aplicar compresas frías en el abdomen y las patas de tu perro. Humedece una toalla con agua fresca y colócala sobre su cuerpo durante unos minutos para ayudar a reducir su temperatura corporal. Nunca uses hielo directamente, ya que esto puede hacer que su temperatura baje demasiado rápido.
3. Consulta con el veterinario
Si los síntomas persisten, lo más importante es acudir al veterinario para una evaluación profesional. El veterinario podrá tomar la temperatura de tu perro de manera precisa y determinar la causa exacta de la fiebre, iniciando un tratamiento adecuado según el diagnóstico.
La fiebre en perros es una señal de que el cuerpo está combatiendo alguna enfermedad o infección. Aunque es posible identificar síntomas sin un termómetro, la única forma precisa de medir la temperatura es con una herramienta adecuada. Ante cualquier sospecha de fiebre, lo mejor es siempre acudir al veterinario para un diagnóstico y tratamiento correcto. No esperes a que los síntomas empeoren, ¡el bienestar de tu perro es lo más importante!
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